El patinaje contribuye a mejorar el estado físico aumentando la resistencia aeróbica, activado la circulación sanguínea, y fortaleciendo piernas, pulmones y corazón. Contribuye además a desarrollar el equilibrio, la concentración y la coordinación; aportando mejoras destacadas en niños con pequeñas dificultades motrices.
A nivel emocional trabaja bajo los conceptos de atención, disciplina, trabajo, y auto superación; fomentando de este modo a los niños la autoconfianza y seguridad en sí mismos; la superación de los miedos y obstáculos con la premisa que todo es posible con aprendizaje y trabajo.